El Lucas Oil Stadium se vistió de nuevo de football para presentar la segunda aparición de los Colts de Indianapolis en pretemporada. Los de la herradura se enfrentaron a unos Chicago Bears con los que han estado entrenando durante esta semana. Nueva derrota que deja buenas impresiones, y alguna que otra preocupación.
Más allá del resultado, tal y cómo había adelantado Chuck Pagano, pudimos ver jugar a las alineaciones titulares durante todo el primer cuarto y parte del segundo. Se cometieron errores, pero también se hicieron algunas cosas bien. Como notas más negativas la cantidad de placajes fallados y la falta de confianza que inspiró la protección al QB de la línea ofensiva. En contrapartida, la defensa contra la carrera pareció funcionar y el backfield mostró que puede ser un punto fuerte esta temporada.
La línea ofensiva dio la impresión contraria a la del último partido contra los Eagles. Se supo bloquear para la carrera, pero no se protegió bien al QB. Se ha hablado mucho durante la offseason de la importancia de la continuidad para el éxito de la OL, pero ayer vimos que salía como titular Jonotthan Harrison como center en lugar de Khaled Holmes. Jack Mewhort se vio sobrepasado en un par de ocasiones en las que dejó que la defensa llegara hasta el QB. Anthony Castonzo cometió un error que se tradujo en un pase incompleto. No creemos que los errores en la protección del pase sean un asunto como para echarse a temblar, pero sí parece que hay que trabajar en ello y no confiarse.
En el backfield, primera aparición en pretemporada de Frank Gore. El ex de los 49ers tuvo dos carreras para 10 yardas. También vimos jugar, después de dos años apartado del juego por lesiones, a Vick Ballard. El cuerpo técnico se está tomando en serio la cautela con su regreso y al igual que Gore, su participación se limitó a dos carreras. Josh Robinson volvió a deslumbrar y hay ganas de verle jugar algún snap junto al primer equipo. Anoche consiguió 61 yardas en 13 carreras (4,7 por intento) y agarró un pase para seis yardas. Aún hay cierta competición en los últimos huecos del backfield, pero parece que Robinson ha venido para quedarse.
T.Y. Hilton se estrenó como millonario en el Lucas Oil. Dejó caer un pase al suelo, pero en la siguiente jugada consiguió 45 yardas. Moncrief consiguió una recepción profunda para 20 yardas, pero dejó que interceptaran un balón a Hasselbeck que, la verdad, podría haber estado mejor lanzado. Andre Johnson se coronó en la endzone en una conversión de 2 puntos. Duron Carter estuvo desaparecido por completo. Phillip Dorsett tuvo 3 recepciones para 21 yardas y terminó en la banda por una lesión menor de rodilla.
Andrew Luck gozó de más minutos de juego que en el último partido. Tuvo un par de drives en los que se vio apurado por la defensa de Chicago, pero consiguió sostener un tercero durante 89 yardas que remató con un touchdown de carrera. Completó también el pase a la endzone en la conversión de dos a Andre Johnson. Más allá de la actuación de Luck, el juego de los quarterbacks suplentes fue decepcionante. Tanto Matt Hasselbeck (6/9 para 59 yardas, una intercepción y un fumble perdido) como Brian Bennet (1/7 para 17 yardas) están teniendo una pretemporada algo dura.
La buena noticia en defensa es la gran actuación de la línea defensiva y, en general, de todo el front seven del primer equipo. Se supo presionar y se supo penetrar. Frente a un corredor de la talla de Matt Forte, la defensa contra el juego terrestre sobresalió. Kendall Langford y Arthur Jones cumplieron bien su papel. El novato David Parry demostró que hoy por hoy es el mejor nose tackle con el que cuenta el equipo. Con sus buenas actuaciones tanto en el camp como en el partido anterior ha conseguido unas cuantas repeticiones con el primer equipo, y no sería una tontería verlo participar más de lo que hubiera parecido cuando llegó en la quinta ronda del pasado draft. Su compañero de Stanford, Henry Anderson, tuvo también su oportunidad junto al primer equipo y no lo hizo mal. En el exterior, Erik Walden tuvo una noche impresionante, Trent Cole demostró que aún está en forma y Jonathan Newsome también tuvo un par de jugadas de calidad. En general se volvieron a fallar algunos placajes importantes. No fueron tan decisivos con en la derrota contra Philadelphia, pero es algo en lo que se debe seguir trabajando, y duro.
Dos de los aspectos que mejor funcionaron el año pasado (los equipos especiales y la disciplina con los penaltis) fallaron estrepitosamente. La cobertura en los retornos permitió unas posiciones de campo que favorecieron mucho a los Bears. Además, en contra de a lo que nos tienen acostumbrados, se cometieron muchos penaltis.
Como solemos decir, aún es pretemporada y el resultado es lo de menos. Los primeros equipos en defensa y ataque dieron buena impresión en general y con eso nos quedamos. Al final del segundo cuarto, los Colts ganaban 11 a 9. Lo que preocupa es la falta de profundidad en algunos puestos y que se han corregido algunos errores, pero se vuelven a cometer otros y no dejan de surgir algunos nuevos.
Ayer por la noche vimos un partido en el que tanto las virtudes como los defectos pudieron apreciarse a simple vista. Sorprende especialmente lo bien que se jugó contra la carrera y lo mal que se protegió al QB. Lo más importante de todo: que aún queda tiempo para seguir mejorando.
Fotografía: Matt Bowen.
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