miércoles, 24 de junio de 2015

Perfil de estrella: Vontae Davis, CB.

Vontae Davis #21 - Cornerback
Altura: 5'11'' (1,80 m)
Peso: 207 (93 kg)
Experiencia: 7
Lugar de nacimiento: Washington, D.C,
High School: Washington Dunbar
College: Illinois

A día de hoy, Vontae O. Davis es uno de los cornerbacks top de la liga y MVP de la defensiva de los Colts. La secundaria se crece bajo su sombra y cuando ha estado ausente, el hueco que ha dejado ha sido demasiado grande.

Davis fue elegido por los Miami Dolphins en primera ronda allá por 2009. Su falta de madurez y su propensión a la mala vida (dicen que llegó a asistir a algún entrenamiento tarde y oliendo a alcohol) hicieron que la franquicia de Florida se deshiciera de él en 2012. Su llegada a Indianápolis fue una apuesta arriesgada, pero podría considerarse uno de los mayores aciertos de Ryan Grigson, el actual general manager. Davis no sólo se ha tranquilizado, mostrando una madurez de la que carecía cuando llegó, sino que se ha convertido en uno de los jugadores más valiosos con los que cuenta el equipo y uno de los mejores de la liga en su posición.

Hermano de sangre del TE Vernon Davis, Vontae ha sabido progresar como jugador desde su llegada a la NFL. No ha dejado de desarrollar todo el potencial que tiene, consiguiendo unos resultados avasalladores. Con los Colts se ha comprometido como no lo hizo con los Dolphins y su producción ha mejorado sensiblemente. Durante la última temporada consiguió forzar el peor rating de pase de toda la liga (38,8). Los QBs que lanzaron contra él consiguieron completar 31 de 72 intentos para 405 yardas, cero touchdowns y cuatro intercepciones. Según Pro Football Focus fue el sexto mejor jugador de la NFL. Fue elegido por los aficionados para el Pro Bowl y el número 59 del Top 100 por sus compañeros.


En el campo es rápido, duro e inteligente. Tiene controlada la posición del balón en todo momento. Sabe anticiparse a los receptores y es capaz de anularlos sólo con su presencia. Es un tipo que entrena con devoción por mejorar. Un jugador técnico y físico, al que no le da vergüenza cargar con todo. Placa con dureza y eficacia y ha llegado a conseguir uno de los mayores logros que un CB puede conseguir: que no lancen a su lado ni una sola vez en un partido. Su talento lo adapta a la perfección a la defensa al hombre que tanto le gusta a Pagano. Es uno de esos jugadores que mejoran sustancialmente a cualquier plantilla.

Davis se ríe cuando recuerda sus años de juventud. Admite que no se tomaba su profesión todo lo en serio que debería. Es consciente de que ha pasado página y no reniega de su pasado: "si las cosas que pasaron en Miami no hubieran pasado, no sería la persona o el jugador que soy hoy". Desde que llegó al equipo, ha sabido conectar con Chuck Pagano (que también jugó como defensive back), con el que mantiene una amistad estrecha. Que la cercanía con Pagano ha ayudado a templar su actitud no es un secreto.


Parece que Frank Gore ha querido robarle el 21, pero el equipo lo ha recompensado manteniéndole el dorsal que llevó Bob Sanders. Como lo recompensó la pasada temporada con un contrato de 36 millones de dólares por 4 años. Su presencia en el campo es decisiva, tanto, que cuando ha faltado por lesión, se ha visto que se ha convertido en un jugador de los que el equipo depende para que su juego se desarrolle con normalidad.

Aún puede (y debe) seguir mejorando. Si a su anticipación y velocidad se le sumara un mejor control del balón con las manos, podría convertirse en el corner definitivo. Las cuatro intercepciones cosechadas durante la última campaña no están mal, pero con más entrenamiento y trabajo duro podrían llegar a ser alguna más.

No hay duda de que saldrá en septiembre como CB número 1. Tiene que mantenerse sano y no puede levantar el pie del acelerador ahora. Aún es joven y tiene que demostrar que puede seguir jugando al mejor nivel de la competición. Desde su llegada, Ryan Grigson ha tomado buenas y malas decisiones. Darle una oportunidad a Vontae Davis ha sido una de las mejores.





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