miércoles, 27 de mayo de 2015

Perfil de estrella: Robert Mathis, OLB.

Robert Mathis #98 - Outside Linebacker
Altura: 6'2'' (1,88 m)
Peso: 246 (112 kg)
Experiencia: 13
Lugar de nacimiento: Atlanta, GA.
High School: McNair HS
College: Alabama A&M


Robert Nathan Mathis es un auténtico icono dentro y fuera de Indianapolis. Lleva a sus espaldas seis Pro-Bowls, 2 convocatorias para el All-Pro, y un Super Bowl. A lo largo de su carrera ha conseguido 487 placajes, 111 sacks, 48 fumbles forzados y una solitaria intercepción. Pero más allá de los premios y las estadísticas, verlo en acción es un auténtico espectáculo. Cuando engancha su pinza sobre el enemigo no hay poder humano que pueda hacerlo retroceder.



Llegó a los Colts en 2003 como una apuesta personal de Dom Anile, el ojeador que convenció a Bill Polian de que, a pesar de su estatura y el programa del que procedía, tenían que hacerse con él a toda costa. Llegó en la ronda 138 global como defensive end. Por lo que cuenta el staff técnico de aquella época, impresionó desde el primer entrenamiento. Después de un año de rookie en el que dio muy buenas sensaciones, en 2004 tuvo algo más de protagonismo y comenzó a dar los primeros pasos hacia su reinado y dominio absoluto como pass rusher. Su corta altura, que hizo que fuera cuestionado en un principio, se convirtió en una de sus armas para deshacerse con facilidad de los ofensive tackles. Poco a poco se fue haciendo indispensable en el equipo y pasó a ser utilizado en prácticamente todos los downs. Jim Irsay tuvo la idea de convertirlo a linebacker y el resto ya es historia.


En 2013 jugó la que ha sido su mejor temporada. Después de haber vivido en cierto modo a la sombra de Dwight Freeney, aquel año consiguió una producción que superaba la combinada entre los dos del año anterior. Fue líder de la liga en sacks, con 19 y medio, llegó a provocar 8 fumbles, y se coronó en lo más alto de la posición.

Tras una temporada brillante, en 2014 fue suspendido 4 partidos por uso de sustancias ilegales y se lesionó en un entrenamiento para todo el año, sin poder jugar un solo encuentro. Su ausencia dejó un hueco que obligó a Greg Manusky a recomponer todo el esquema defensivo para intentar cubrir dicho hueco. Sin la velocidad, la fuerza y el instinto innato para poner en apuros al QB rival, el nivel del pass rush del equipo se resintió notablemente. No hay que olvidar tampoco, que además de su aporte fundamental contra el pase, Mathis es un tipo tremendamente sólido contra la carrera.


Robert Mathis tiene cara de asesino en serie, y eso acojona. Ha practicado mucho frente al espejo, y no hay rival que no se sobrecoja cuando el #98 le mira a los ojos. Pero la realidad detrás de esa careta que se pone sobre el turf de los campos de football no refleja su verdadera personalidad. Dicen de él los que lo conocen que es un auténtico paradigma de profesionalidad. Un tipo que trabaja duro y tiene mentalidad de equipo. Durante su lesión en 2014 no dejó la banda; hablaba con jugadores y entrenadores y sufría como un aficionado más. Su dedicación es incuestionable. Tiene una madurez admirable, es tozudo como una mula y el vestuario le sigue con lealtad.


A lo largo de su carrera ha tenido momentos inolvidables. Supo ser junto a Dwight Freeney el alma de la defensa durante la época de Polian y Manning, y ha sabido sobresalir cuando le ha tocado el turno de hacerlo junto a Grigson y Luck. Ha derribado quarterbacks a placer y ha provocado una inmensidad de fumbles. Su velocidad y su potencia han sido su marca personal, pero no podemos olvidar que Mathis tiene ya una edad. La lesión de la que viene tampoco va ayudar y ya hay quién cuestiona cómo será su regreso. Por el momento se está perdiendo las primeras actividades organizadas por el equipo, pero parece que estará listo para reincorporarse en agosto. Es complicado adivinar a qué nivel vaya a poder jugar, pero seguro que su capacidad de esfuerzo y su competitividad serán buenas armas para que, si no es el Mathis de hace dos temporadas, al menos cumpla el papel con eficacia.

Hace tiempo que en Canton tienen una chaqueta dorada reservada para él. Ha sido uno de los jugadores más importantes que han pasado por el equipo en los últimos tiempos y no sería raro verlo en el ring of honor una vez que decida retirarse. "La pinza" ha sembrado el terror por los campos de juego durante una buena cantidad de tiempo, y el año pasado dejó que sus rivales descansaran tranquilos. Cuando en septiembre regrese de nuevo la competición, esperamos que Robert Mathis vuelva a ser la trituradora de líneas ofensivas, el horror en el backfield, y la pesadilla recurrente de los quarterbacks.






3 comentarios:

  1. Un artista del "Strip Sack" su lugar en Canton y en el Ring of honor sólo es cuestión de tiempo. Una injusticia que en 2013 no fuera premiado como jugador defensivo del año de la NFL. Si mal no recuerdo, sólo él y Castonzo son los jugadores drafteados por Polian que sobreviven en Indy, y junto con Vinateri, son los únicos que permanecen en la plantilla que han salido campeones del SB XLI.
    Tras la salida de Wayne, si tuviera que comprarme una camiseta de los Colts, hoy en día sería la nº 98...

    ResponderEliminar
  2. Para mí, Mathis es uno de los mejores jugadores que ha pasado por la franquicia. Quizás no le quede mucha gasolina, pero aún tiene un buen año por delante para demostrar que aún no está quemado.

    Por cierto, el favorito de los aficionados Pat McAfee, que parece que va a estrenarse en el stand up comedy, también fue drafteado en la era de Polian.

    ¡Un saludo!

    ResponderEliminar
  3. Sabía que me iba a olvidar de alguno... y resulto ser el gran Pat! Kickers are people too...

    ResponderEliminar