Este año, los Dallas Cowboys han demostrado ser un equipo "de verdad". Han ganado 10 de los 14 partidos que han jugado y, aunque aún no han conseguido ganar su división, están a sólo un paso de playoffs. Los Indianapolis Colts viajan esta semana a Dallas como campeones de la AFC Sur y su presencia en postemporada está asegurada, pero tras la pésima imagen dada en los dos últimos partidos querrán resarcirse ante un equipo contendiente y fuera de casa.
En palabras del propio Chuck Pagano: "Va a ser un gran desafío que va a servir para ver dónde estamos exactamente". Se ha jugado especialmente mal en ataque durante los dos últimos encuentros y la ofensiva tiene que retomar el nivel mostrado en jornadas anteriores. Jugar contra los Cowboys este año, y en su feudo, será la prueba definitiva para saber hasta dónde puede llegar este equipo.
Los Cowboys han sido una de las sorpresas de este año. Parece que el gran Jerry Jones se está dejando aconsejar por su staff técnico y las cosas han mejorado mucho para los de Texas. Su mejor arma es una ofensiva compensada que cuenta con grandes nombres: Tony Romo, DeMarco Murray, Dez Bryant o Jason Witten. Además de un QB, un RB, un WR y un TE de lujo, la ofensiva vaquera cuenta también con una de las mejores líneas de la liga. Será un verdadero desafío para la defensa de los Colts que, contra equipos medianos y pequeños funciona bien, pero no ha sabido frenar a ofensivas potentes como las de Nueva Inglaterra o Denver.
En defensa, los Colts se han mostrado muy irregulares durante toda la temporada. El domingo se medirán contra uno de los ataques más potentes. Aunque es posible que Murray acabe jugando, no hay que olvidar que lo hace recién operado de una mano. El RB de los Cowboys ha tomado mucho protagonismo y está teniendo un año muy bueno, pero una lesión en la mano puede pasarle factura incluso al que, hasta ahora, está siendo uno de los mejores en su puesto. La defensa contra la carrera agradecerá que un jugador de la talla de Murray no juegue al mismo nivel de siempre.
El CB Vontae Davis es duda. Es posible que pueda jugar ya que el jueves entrenó, con limitación, pero entrenó. Su aporte a la secundaria es esencial y si el domingo sale al campo veremos un gran duelo entre el corner estrella de los Colts y Dez Bryant.
Será esencial que la defensa sepa parar a los Cowboys en tercer y cuarto down. Los de Texas son buenos en ataque convirtiendo en estas situaciones, pero los Colts son aún mejores parando. Es posible que el ganador de esta lucha en tercer o cuarto intento acabe por llevarse el partido.
Las estadísticas defensivas de Dallas no son buenas, pero la ofensiva ha funcionado tan bien que han ganado partidos a pesar de no contar con la mejor de las defensas. El ataque de Indianapolis tiene que saber sacarle partido e intentar retomar el camino que les ha llevado durante todo el año a los primeros puestos del ranking ofensivo.
Este ataque ha sufrido mucho durante las dos últimas jornadas. La que hasta ese momento era una de las mejores ofensivas de la liga cometió unos errores imperdonables. Browns y Texans sacaron a relucir las vergüenzas de unos Colts que consiguieron ganar en ambos partidos gracias a la falta de efectividad de las ofensivas contrarias y no por mérito propio. No funcionó la carrera. No funcionó el pase. No funcionó la línea. Se volvió a entregar el balón varias veces y nada parecía salir bien. Este domingo tienen la oportunidad de demostrar que lo de las dos últimas semanas va a quedar en el olvido.
Una de las razones de este declive parte de la ausencia de Ahmad Bradshaw. Su versatilidad y su energía eran piezas claves para los Colts. El ex-giant servía tanto corriendo como recibiendo y bloqueando. Trent Richardson sigue acumulando carreras para cero yardas y ni siquiera el buen momento que está teniendo Dan Herron parece suficiente para cubrir el hueco que ha dejado Bradshaw.
Es posible que no veamos jugar a T.Y. Hilton. Ayer jueves no entrenó y con el campeonato de la división en la mano no creemos que sea necesario forzarlo para que salte al campo el domingo. Hilton es el WR de referencia y se va a sentir que no esté, pero esta ofensiva cuenta con otras armas que deberán darlo todo para limpiar la imagen de las últimas semanas. Reggie Wayne, Donte Moncrief, Coby Fleener, Dwayne Allen e incluso Hakeem Nicks deberán aprovechase de la secundaria de los de Dallas para mover las cadenas, sorprender con big plays y anotar puntos.
Este domingo por la noche veremos un partido entre dos de los equipos que más veces entregan el balón al contrario. Será más importante que nunca proteger la posesión y no permitir que la defensa de Dallas provoque más de un turnover.
Los Cowboys aún no han ganado su división. Aún están a tiempo de quedarse fuera de playoffs, incluso. Tony Romo y compañía son especialistas en tirar a la basura temporadas en las últimas jornadas. Las cosas están apretadas en la NFC Este. Si Dallas pierde este domingo y Philadelphia gana, su pase a postemporada puede verse en peligo. Es lo que tiene la conferencia nacional. Los Colts, por el contrario, no se juegan nada más que crear o no expectativas sobre sus posibilidades en enero. ¿Serán capaces de amargarle el fin de fiesta a un equipo "de verdad"?
Fotografía: Tim Heitman
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